Ella ama los animales y la gata
necesitaba un hogar.
Lauren Maners es una fiel defensora de los derechos de los animales y a lo largo de toda su vida se
ha caracterizado por su intenso amor a estos. Gracias a ello ha podido dar ayuda a todos los que se
ha topado en situación de calle. Pero ante su próximo reto, decidió hacer una pausa a esta noble
causa.
Se aproximaba la fecha en que daría a luz a su pequeña Kylie, por lo que vio prudente hacer a un
lado momentáneamente sus labores de rescate. Aunque se lo propuso, no logró mantener esta
recién adoptada norma, pues llegó a su vida una gata sin hogar.
Lauren cuenta: «Tenía una larga historia en la crianza de animales, pero cuando me acerqué al final
de mi estado de gestación, decidí que era hora de tomar un descanso de todo eso, ya que los
animales que normalmente criaba necesitaban muchos cuidados«.
El mismo día en que había decidido hacer a un lado la norma de no rescatar animales, conoció a
una hermosa gatita. Y por supuesto que Lauren no se arrepiente ni por un momento de sobrepasar la
regla, ya que, gracias a esto pudo cambiar la vida de esta felina para siempre.
El mismo día en que había decidido hacer a un lado la norma de no rescatar animales, conoció a
una hermosa gatita. Y por supuesto que Lauren no se arrepiente ni por un momento de sobrepasar la
regla, ya que, gracias a esto pudo cambiar la vida de esta felina para siempre.
Dove, es el nombre que le pusieron a la gata, de inmediato comprendió que esa era su casa y no
dudó en acomodarse. Lauren y su esposo averiguaron de donde posiblemente era, pero la realidad
era que mucho antes de que la encontraran, durante un buen tiempo vivió en las calles de la zona.
No pasó mucho tiempo sin que Dove entendiera que allí sería el lugar donde nacerían sus pequeños,
realmente se veía muy cómoda se sentía muy bien. Tanto Lauren como Dove se encontraban muy
cerca de dar a luz, por lo que pudieron compartir mucho durante los días previos al nacimiento.
Lauren cuenta sonriendo: «Ella me seguía a todas partes a donde iba, y le encantaba sentarse afuera
conmigo por las mañanas en nuestra área cercada y dejarme frotar su barriga mientras
desayunábamos juntas». Al cabo de unos días Lauren daría a luz a su bebé, pero
sorprendentemente, Dove también se puso en la misma labor.
Mientras estuvieron en el centro de salud, Dove también tuvo seis lindos gatitos.
