La conmovedora historia de esta devota madre ha cautivado al público, pues ella nunca perdió la esperanza de que su hijo despertaría.
Después de sufrir un terrible accidente automovilístico en 2006, Wang Shuboa permaneció en estado de coma durante 12 años, pero su madre no se despegó de él en ningún momento, con la esperanza de que algún día podría despertar.
El día finalmente llegó y Wei Mingying, de 75 años de edad, pudo estar presente en el momento en el que su hijo abrió los ojos otra vez. Sin embargo, no fue una tarea nada sencilla.
A lo largo de más de una década, Mingying tuvo que hacerse cargo de los gastos para el cuidado de Shuboa, despidiéndose de los ahorros de toda su vida, e incluso reveló que durante los momentos más difíciles pasó hasta un mes sin comer, de acuerdo con el Daily Mirror.https://www.youtube.com/watch?v=RiRaMZ-it-U
Todos los días, la mujer se paraba a las 5 de la mañana para poder bañar a su hijo, alimentarlo y para mantener su cuerpo en movimiento. Su padre falleció desde que era muy joven, por lo que Wei tuvo que hacerse cargo de todo ella sola y aún tiene una deuda de más de 17,000 dólares.
“Estoy muy feliz. Espero que se recupere por completo. Nunca me daré por vencida con él”, dijo la mujer al sitio Beijing News. Desde que Wang despertó, no ha podido recuperar su capacidad de habla, pero le ha sonreído a su madre y se ha mostrado muy optimista.
La historia de esta devota madre ha conmovido a la sociedad china y a través de las redes sociales varios usuarios han compartido este ejemplo de amor y dedicación.