Dieta de la manzana: cinco días para adelgazar y desintoxicar tu cuerpo

Te contamos en qué consiste esta dieta, pensada para hacerte perder peso de forma rápida.

Sin duda, una de las mejores maneras de mantenernos saludables y en forma es llevar una alimentación equilibrada y realizar ejercicio físico. Sin embargo, hacer ambas cosas con constancia no siempre es fácil.

Por eso, aunque no sea muy saludable, muchas personas optan por soluciones un poco más drásticas, que nos prometen perder peso de forma rápida y sin tener que esforzarnos en ser constantes. Una muestra de ello es la dieta de la manzana.

A lo largo de los cinco días que dura, la manzana se convierte en la gran protagonista de nuestra mesa y en ella se basará la alimentación a seguir para sentirnos menos hinchadas, sobre todo en la zona abdominal, pero los propios defensores de esta propuesta explican que nunca se podrá alargar en el tiempo.

Todo lo bueno de la manzana

Lo cierto es que, más allá de esta dieta, las manzanas son estupendas por muchos motivos por los que debería formar parte de tu alimentación, pero una dieta basada casi en exclusiva en esta fruta nunca puede ser saludable ni sostenible a largo plazo.

La manzana es una de las frutas más habituales en las despensas de todo el mundo, no solo por su estupendo sabor, también por sus muchas propiedades. Contiene muchas vitaminas, minerales, antioxidantes y grandes cantidades de fibra.

Esto las hace estupendas para incluirlas en nuestra dieta porque además pueden ayudarnos cuando intentamos perder peso, aportan muy pocas calorías y resultan muy saciantes, lo que hace que nos sintamos satisfechas por más tiempo.

Aunque no lo parezca, la manzana es más de un 80% agua, por lo que además te mantiene hidratada, también es efectiva para combatir la retención de líquidos. Es diurética y depurativa gracias a la cisteína que contiene.

Tiene pectina, una fibra soluble que ayuda a reducir el colesterol en la sangre y evita que la grasa se acumule en los vasos sanguíneos, previniendo enfermedades cardiovasculares. También ayuda a regular el tránsito intestinal.

Son una gran fuente de energía gracias a sus hidratos de carbono, principalmente en forma de fructosa, que nuestro cuerpo absorbe y distribuye más lentamente por lo que su efecto estimulante dura más tiempo.

Dieta de la manzana

El primer día de dieta solo se permite comer manzanas, recuerda la importancia de mantenerse hidratada, tendrás que beber unos dos litros diarios. El segundo día, toma manzanas para desayunar y cenar, para comer puedes tomar una ensalada verde, pero sin aceite.

Durante los días restantes, el desayuno estará formado por pan integral, manzana y pavo o un huevo cocido. El tercer día tendrás que comer una ensalada verde y cenar manzana. El cuarto puedes comer verduras al vapor y atún, y para cenar, cereales con leche desnatada.

Mientras, para comer el quinto día opta por carne al horno y una ensalada verde; para cenar, de nuevo manzanas. Pasados estos cinco días es probable que hayas perdido el peso que querías, pero es más probable aún que lo recuperes en cuanto vuelvas a comer normal. Esta dieta no es muy variada ni saludable, por lo que es poco probable que un especialista la recomiende.

No es nada recomendable alargar la dieta de la manzana porque no es saludable, tiene una gran carencia de nutrientes y una ingesta calórica muy baja. Lo que nos puede causar mareos, dolor de cabeza, cansancio, irritabilidad o fatiga.

Si lo que buscas es perder peso de forma efectiva y segura, la única forma de conseguirlo sin poner en riesgo tu salud es ponerte en manos de profesionales, médicos, nutricionistas y expertos en la materia que se encarguen de diseñar una dieta a tu medida.