En la actualidad vemos como muchas mujeres están cerradas a la idea de ser madres, el hecho de pensar que van a traer un niño al mundo y su vida comenzará a cambiar las abruma por completo y por este motivo hoy en día muchas jóvenes están decidas a no procrear. Sin embargo, tenemos la otra cara de la moneda, donde encontramos a un gran número de mujeres deseosas de poder vivir la mejor experiencia de sus vidas y poder convertirse en madres, pero lamentablemente su sueño se ve truncado por diversos motivos.
En este caso, tenemos a una mujer que tuvo que esperar hasta sus 66 años para por fin cumplir su sueño y lograr ser madre de una hermosa y sana niña.
El 16 de enero del 2005, la vida de Iliescu cambio para siempre por el hecho de convertirse en madre a la edad de 66 años.
Adriana Iliescu nació el 31 de mayo de 1938, por lo que actualmente tiene 84 años. Mientras las personas que logran llegar a esa edad tan avanzada solo intentan disfrutar de sus últimos años de vida rodeados de sus nietos y familiares, Adriana esta criando a su hija, quien es ahora toda una adolescente.
Iliescu, es profesora universitaria y autora de libros infantiles rumana. Tenía una vida normal hasta que en enero del 2005 su historia se hizo viral por el hecho de traer una niña al mundo a sus 66 años de edad a quien la nombró Eliza. La pequeña nació en la maternidad de Rumanía y aunque muchos no lo creían es la hija biológica de Iliescu, pero no su hija genética, ya que Eliza se gesto en el vientre de Iliescu pero por haber sido concebida por un óvulo y un esperma donado.
Gracias a los avances tecnológicos esta mujer pudo cumplir su sueño de ser madre, ya que todo se dio por fecundación in vitro y llegó a recibir el titulo de la madre biológica de mayor edad del mundo en haber dado a luz e incluso se ganó un récord mundial Guinness.
La historia de Iliescu fue conocida a nivel mundial por lo que ella decidió compartir algunos fragmentos de su día a día, ya que todos estaban intrigados como una mujer de tan avanzada edad iba a poder criar a una pequeña.
“Nosotras llevamos una vida normal, llena de felicidad, porque fue eso lo que ella trajo a mi vida, total y completa felicidad. Es mi compañera ideal y aunque sabemos que los años siguen pasando hablamos con total franqueza y normalidad con respecto a cómo deberá hacer ella para continuar su vida sin mí”.
La adolescente tiene un trabajo de medio tiempo y se mantiene de una pensión y aunque no es mucho dinero siente que de alguna manera ayuda con los gastos diarios del hogar, ya que su mamá solo trabaja tiempo parcial dando clases en una universidad.
“A pesar de mi edad yo me siento muy saludable y llena de vitalidad, estoy en forma, cuido mucho mi alimentación, no fumo ni bebo. Si vivo tanto como mis padres, Eliza tendrá 20 años cuando yo fallezca. Aun no estoy lista para dejarla sola, nos quedan más momentos por compartir”.
Iliescu admitió que no es fácil ser madre, pero que se siente feliz y plena por haber podido cumplir su sueño más grande el cual era poder ser madre.
“Yo siempre quise ser madre, lo soñaba y durante años intente quedar en estado pero no tenía una pareja estable y luego me encargue de lleno a mi carrera y deje que fuesen pasando los años. Tener un hijo es algo maravilloso, ella ahora tiene 17 años y aun no me creo que ella sea mi hija”.
No olvides compartir esta publicación y déjanos tu comentario para esta mujer que no tuvo miedo de su avanzada edad con tal de poder cumplir su sueño de ser madre.