El niño Mathew Smith de la ciudad de Ohio, Estados Unidos, nació con una malformación genética, su nariz se veía diferente a la de los otros niños, dijo la enfermera al verlo nacer, sin. importar su condición sus padres, aceptaron al niño.
Más adelante en su vida esto se volvió un problema pues, los compañeros de Mathew empezaron a notar la diferencia, esto le ocasiono bromas, bullying e incluso amenazas de muerte, pues incluso los padres de familia decían que era un ente maligno.
Pasados los problemas en la escuela, los padres decidieron investigar si podían realizar aluna cirugía que le devolviera a su hijo esa tranquilidad, docenas de doctores aseveraron que no había forma pues su nariz tenía un hueso que no les permitía operarle, puesto que si se hacía el niño corría el riesgo de quedar con una nariz mucho peor.
Dos años más tarde, el padre de Mathew, Andreas, encontró en un periódico local un anuncio, un cirujano recién egresado de la Universidad de Masachussets, estaba buscando asistente para su consultorio, pues estaba buscando nuevos horizontes de trabajo.
El padre desesperado por la situación económica de su familia decidió ir a la entrevista,
Por razones obvias, el cirujano le dio el trabajo, pues necesitaba operar a la brevedad, así que empezaron una bonita relación contraactual.
Meses más tarde se dio la oportunidad de conocer a sus familias, ahí es donde el Dr. conoció a Mathew, desde que le vio, se interesó en su caso, agendaron una cita, y sin cobrarle un peso a su padre, se ofreció a operarlo, con un nuevo método de cirugía plástica estética.
Pasaron dos largos meses, entre preparación, medicación, citas, hasta que llego el día de la operación, todos estaban nerviosos por que saliera bien, y dadas las 4 de la tarde, Mathew salió con muchos vendajes y algo aturdido por los anestésicos, ahora habría que esperar como mejoraba.
Hoy en día Mathew es un niño feliz, normal, y sus padres tienen un gran alivio por ser aceptado entre sus compañeros, a pesar de que la aceptación a personas con diferentes capacidades o distintos sería lo ideal, no dudamos que este cambio le vino bien al niño y su familia.